La movida de esta última semana entre Hasbro, que distribuye la versión original del juego Scrabble en Estados Unidos y Canadá, y Mattel, que lo hace en el resto del mundo; contra Facebook por Scrabulous una versión online muy exacta al original. Me hace pensar ¿Dónde esta la línea de separación que arbitra que se esté o no infringiendo los derechos de propiedad?
En este caso nadie discute que la ley esta a favor de Hasbro y Mattel ya que el Scrabulous es una copia exacta del juego. Pero ¿Qué les ha movido a mandar sus abogados a Facebook? El éxito del juego online que cada día reúne más de 500.000 internautas o los beneficios que genera por la publicidad (actualmente sobre 25.000$ mensuales)
¿Está perjudicando esta versión online al juego original o por el contrario están sentados en una mina de oro y beneficiandose de esta publicidad viral gratuita? Al fin y al cabo no hay un competidor directo, ya que ni Hasbro ni Mattel crean juegos basados en web y el propietario de los derechos de las versiones electrónicas del juego, Electronic Arts, solo comercializa el juego para PC y móvil.