He venido comentando la diferencia que existía entre el advergame y la publicidad in-game. El advergame consiste en hacer juegos en torno a una marca o producto y la publicidad in-game es introducir publicidad mediante una plataforma externa mientras el usuario juega.
En el 2006 parecía que estos modelos serían una nueva fuente de ingresos y permitiría a los desarrolladores compensar los crecientes costos de desarrollo y asumir más riesgos en jugabilidad. Asi que Microsoft compró la plataforma Massive incorporated por $200 millones.
Pero igual que el advergame es la eterna promesa, Microsof estaba intentando vender Massive casi regalada por una cifra que no superaba los 7 dígitos. Y el golpe final que cierra el destino de Massive ha sido cuando a primeros de año Electronic Arts decidió encargarse ella misma de vender la publicidad en sus juegos, dejando a Microsoft sin su mayor cliente.
¿Le pasará lo mismo al advergame o aguantará gracias a los juegos online y a las nuevas plataformas móviles?