Hace ya un tiempo empezamos a utilizar Subversion como plataforma de control de versiones para nuestros proyectos. Gracias al cielo, dejamos atrás Sourcesafe, que no creo que lo utilicen ni en la misma Microsoft.
La mayoría de programadores del equipo instalaron como cliente TortoiseSVN, el plugin Subclipse o similares, que cumplen perfectamente su cometido a la hora de trabajar con código. Pero, ¿y lo grafistas?
El problema de estos sistemas es que están ideados para trabajar con texto, y los ficheros binarios como las imágenes pasan a un segundo plano. Hay sistemas geniales como Alienbrain o Perforce para trabajar en este ámbito, pero para un grupo/proyecto pequeño me parecen carísimos.
Tras decidir utilizar Subversion también para gráficos, empecé a buscar un cliente que pudiera satisfacer las necesidades de los artistas:
- Me encantó que TortoiseSVN estuviese totalmente integrado en el propio explorador de ficheros de Windows. Es bastante cómodo utilizar la vista en miniaturas para gestionar gráficos en PSD o TGA.
- Debía ser sencillo ver los ficheros bloqueados por otra persona (Tortoise falla en este aspecto)
- Debía ser sencillo ver si hay nuevos gráficos en el repositorio que todavía no han sido descargados (también falla en esto).
Gracias a esta tabla comparativa de la Wikipedia, probé varias opciones, incluso un plugin de Photoshop para trabajar con Subversion.
Finalmente me decante por SmartSVN. Debo avisar que es un programa comercial, pero hay varios aspectos del mismo que me han convencido:
- Está integrado en Windows y además dispone de cliente propio. Tiene lo mejor de los 2 mundos.
- El listado de ficheros se actualiza automáticamente, por lo que es posible comprobar de un vistazo si un fichero está bloqueado o modificado, si hay ficheros nuevos, etc.
- Es muy completo. Tal vez demasiado para las necesidades de un grafista.
- Es multiplataforma.
- Lo actualizan muy a menudo, corrigiendo bugs y añadiendo mejoras.